Podemos entender como desarrollo los cambios en la conducta o los rasgos que surgen de manera ordenada por un período razonable de tiempo.
Jean Piaget (psicólogo suizo) establece, a grandes rasgos, cuatro etapas en el desarrollo de los/las niños/niñas.
- Etapa sensoriomotora.
- Etapa preoperacional.
- Etapa de las operaciones concretas.
- Etapa de las operaciones formales.
En este esquema se ofrece un breve resumen de toda la información.
Etapa sensoriomotora (nacimiento – 2 años de edad)
Durante esta etapa el niño posee poca capacidad para representar su entorno con imágenes, lenguaje u otros símbolos. Hacia el final de este período pasa de ser meramente instintivo a resolver problemas simples.
Esta fase se compone de seis estadios:
-
Ejercicio de los esquemas sensoriomotores innatos (0 – 1 mes).
El niño responde al medio a través de sus reflejos innatos.
-
Reacciones circulares primarias (1 – 4 meses).
Se denomina de esta forma porque el niño se centra en su cuerpo como objeto de exploración (primarias) y son repetitivas (circulares).
El niño realiza una acción que le produce una experiencia, principalmente centrada en el cuerpo, y la repite. En esta etapa cuando un objeto desaparece de su campo visual, deja de existir, esto es, carece de la permanencia de objeto.
-
Reacciones circulares secundarias (4 – 8 meses).
Su nombre se corresponde a que las reacciones del niños son uniones de esquemas anteriormente formados (secundarias) y son repetitivas (circulares).
En este estadio los actos se vuelven intencionales, es decir, tienen un objetivo precedido por pasos intermedios. Aquí aparece por primera vez la permanencia de objeto (los niños buscan con la mirada los objetos que se le han ocultado). La búsqueda de los objetos es muy importante ya que les permite desarrollar las dimensiones temporal y espacial. También aparece el significado de objeto, esto es, el niño repite conductas que manifestó previamente ante el mismo objeto.
-
Coordinación de los esquemas secundarios (8 – 12 mes).
Se perfeccionan los hitos aparecidos en los estadios anteriores y aparece la causalidad, es decir, emerge el pensamiento simbólico, y ya es capaz de esperar a que le den de comer porque es consciente de que va a suceder; también comienza a distinguir entre medios y fines, esto es, para Piaget, cuando se desarrolla un comportamiento en ausencia de objetivo final lo denomina juego y cuando existe un fin, resolución de problemas.
-
Reacciones circulares terciarias (12 – 18 mes).
Aparece el “pequeño científico”; el niño experimenta para descubrir las propiedades de los objetos y sucesos. También aparece la capacidad de imitar un modelo. Se perfecciona la causalidad ya que en el estadio anterior el niño era pasivo, esperaba la acción del adulto, ahora es él el que solicita activamente la participación del adulto.
Es de especial interés observar como sigue perfeccionando la habilidad de distinguir entre medios y fines; en este estadio el niño comienza a desechar los medios inoperantes que no le ayudan a conseguir el objetivo marcado previamente; Piaget lo denomina “acomodación titubeante”.
-
Invención de nuevos medios mediante combinaciones mentales (18 – 24 mes).
En este estadio el niño aplica esquemas previamente adquiridos a situaciones novedosas; también aparece la “comprensión súbita” del problema y de su solución, el “darse cuenta”.
La permanencia del objeto abarca más tiempo, incluso varios días. La causalidad se beneficia de la simbolización interna, es decir, el niño puede imaginar la causa observando la consecuencia de un acto.
En este estadio el niño es capaz de imitar modelos humanos y no humanos ausentes, lo cual es de vertebral importancia para el desarrollo del juego.
Bibliografía.
- Los orígenes del intelecto según Piaget (1970). Philips, J.L. Editorial Fontanella.
- El nacimiento de la inteligencia en el niño (1969). Piaget, J. Editorial Aguilar.
